En los faldeos del Cerro Colorado se encuentra este santuario consagrado el 2 de septiembre del año 2000. En él se veneran las virtudes y el modelo de santidad manifestados en la niña Laura Vicuña.
Laura del Carmen Vicuña Pino, nacida en Chile, en 1891, fue llevada a Argentina a la edad de ocho años. Alumna del colegio de las Hijas María Auxiliadora, en Junín de los Andes, desarrolló un gran amor por la Virgen y por la Eucaristía. Fue emigrante, sufrió el abandono y la violencia intrafamiliar. Fue una misionera en su propia familia y en el colegio y llegó a ofrecer su vida para la salvación de su madre. Muere a la edad de 12 años el día 22 de Enero de 1904, siendo beatificada el 3 de septiembre de 1988 por Juan Pablo II.
Este es el santuario de y para los niños y jóvenes. Enseña que la santidad es posible en esas etapas de la vida y en la cotidianidad familiar, escolar y laboral. Es «un faro para irradiar el testimonio de vida de Laura”.